viernes, 8 de marzo de 2013



Mulata

Ay, mulata, si tu olvido
recobra el conocimiento,
dile que mi sentimiento
no pierde su buen sentido.

Quiero decir que, en mi ser,
estás como el primer día,
cuando dijiste ser mía
y te entregué mi querer.

Mulata, sí, deben ser 
los climas de tu cintura
que emborracha mi locura
y urgen a mi padecer.

Ese mohín tan coqueto
que surgía ante mis requiebros,
te juro que lo celebro
y en su recuerdo me inquieto.

Luego, surge el frenesí
de retrotraer tu abrazo,
y, en tu singular regazo,
sembrar mi pasión por ti.

Mulata, juro que si 
me recuerdas todavía,
he de recobrar el día
para que vengas a mí.

He de sacar melodías
del fondo de los turpiales,
y con cantos ancestrales
entramaré mi poesía.

A fin de que tu retorno
se amalgame con mi espera,
dejaré entre tus caderas
mi tacto y por su contorno.

En fin , mulata, si tú
te decides a venir
te entregaré el porvenir,
mi amor y mi negritud.


Entrar a la poesía de José Sosa Castillo es entrar a un mundo de poesía coral de profundas resonancias, de tambores, de música cuyos ritmos contagiosos y sonoros imprimen al contenido de las palabras no solo la cadencia y el vigor sino el sentido de lo trascendente y lo mágico.
Aminta Buenaño

2 comentarios:

  1. genial, t pusiste pilas con esta pagina mañana mismo la revisará mi pa!!!...

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  2. Mi favorito es palabras a Isabel, si lo pudiesen publicar seria magnífico!!!!!!!!!!!!

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